“Pan para nadie, bombas para todos” (El hambre made in Washington)

Publicado el 30 de octubre de 2025, 4:50

Aquí viene el golpe directo al estómago:
mientras los demócratas ofrecen una sola ley para renovar el SNAP, el programa que alimenta a 42 millones de estadounidenses —incluidos 39 % de todos los niños del país—, el senador republicano John Thune responde con su frialdad habitual: “no pienso ceder.”

Y ahí está el detalle: mientras Thune y sus colegas bloquean comida para los pobres, Estados Unidos acaba de enviar $40 mil millones a Argentina, miles de millones más a Ucrania e Israel en forma de bombas, y sigue gastando millones en “reconstruir” (léase seguir destruyendo) la Casa Blanca para preparar otro ciclo electoral con Trump al mando.

Así de claras están las prioridades:
🍞 No hay dinero para pan, pero sí para explosivos, drones y dictadores amigos.
🎯 No hay fondos para niños, pero sí para contratistas de defensa y misiles Patriot.
💸 No hay presupuesto para el hambre, pero sí para comprar gobiernos en el extranjero.

El SNAP, el viejo programa de cupones de comida, no es caridad: es el único hilo que separa a millones de familias del hambre. La mitad de los beneficiarios son menores o adultos mayores. Pero ahora, con el cierre del gobierno, esos fondos se evaporan como si fueran un lujo.

El Departamento de Agricultura, controlado por la administración Trump, afirma que “no hay dinero legalmente disponible” —una mentira cínica. Los expertos del Center on Budget and Policy Priorities y de Georgetown University confirman que existen más de $5 mil millones en reservas de contingencia que podrían usarse para mantener el programa. Pero prefieren guardar esos fondos para “emergencias naturales.”

¿Y el hambre de millones de niños? ¿No cuenta como desastre?
Tal vez si las tripas de esos niños sonaran como bombas cayendo sobre Gaza o Járkov, los republicanos las escucharían.

Mientras tanto, en lugares como Twin Falls, Jerome, Burley, y Rupert, el hambre ya no es una metáfora. En el Valle Mágico, más de 14,000 residentes dependen del SNAP. Con el retraso de pagos, los bancos de comida —desde The Idaho Foodbank en Twin Falls hasta Helping Hands Mission en Burley— se están quedando sin recursos. El Idaho Foodbank advierte que la demanda podría aumentar hasta un 40 % si los beneficios no llegan en noviembre.

“Si el SNAP se apaga, será el mayor episodio de hambre masiva desde la Gran Depresión,”
advirtió Joel Berg, director de Hunger Free America.

Y todo esto sucede mientras el gobierno gasta $8 mil millones al mes en misiles, tanques y “ayuda militar humanitaria.”
Pan, no. Bombas, sí.

Así que no, señor Thune, no se trata de presupuesto: se trata de prioridades morales.
Estados Unidos puede alimentar al mundo, pero prefiere armarlo.
Hoy los refrigeradores están vacíos.


🗺️ RECURSOS LOCALES Y REGIONALES

🧺 Magic Valley (Twin Falls, Jerome, Burley, Rupert, Gooding, etc.)

Línea directa: Idaho CareLine – marca 2-1-1 o 800-926-2588
Sitio del mapa interactivo: Google Map – Food Banks Idaho

Direcciones de los bancos de comida en el Valle Mágico:
Recursos Sin SNAP en Idaho – 99.1 La Perrona

🏔️ Idaho (general)

Más de 130 000 habitantes del estado dependen del SNAP.
Red estatal de casi 300 bancos y cocinas comunitarias:
👉 idahofoodbank.org

🌲 Washington State

wa211.org o marca 2-1-1.
La demanda en Tri-Cities y Yakima podría subir más de 25 %.

🌊 Oregon

211info.org o llama 2-1-1.
El Oregon Food Bank lanzó una campaña de emergencia para cubrir el vacío federal.


📚 FUENTES


En resumen:
Washington financia guerras y destruye ciudades enteras mientras en el noroeste se enfría la estufa y el refri está vacío.
El hambre ya no es una estadística: es una bomba sin explotar… dentro de casa. (Ya somos "tercermundistas".)

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