LA BARBIE DE ICE Y SU MANADA DE ESCÁNDALOS

Publicado el 8 de diciembre de 2025, 5:07

Kristi Noem, entre perros, amantes, y el desastre que ella misma desató

En su “perra vida”, Kristi Noem jamás imaginó que la historia del firulais que ella ejecutó a balazos se convertiría en una metáfora perfecta de su paso por el gobierno: mala dueña, peor adiestradora, y ahora cabecilla de una jauría descontrolada llamada ICE. Y como todo mal amo que presume disciplina pero vive en el desmadre, su propia manada ya se le está volteando.

Porque sí: la Secretaria de Seguridad Interna preferida de Trump está en la cuerda floja. Y no por falta de brutalidad —esa, al contrario, le sobra— sino porque en la Casa Blanca ya se cansaron de su combustible estilo telenovelero, cortesía de su presunto Sancho Claus, Corey Lewandowski, que por años ha jugado a ser su asesor, su sombra… y según varios reportes, su amante.
(https://www.vanityfair.com/news/2023/09/governor-kristi-noem-god-fearing-family-woman-and-corey-lewandowski-trump-creep-reportedly-had-yearslong-affair)

La crisis en DHS: Noem pierde control de la jauría

Según The Bulwark, en DHS ya le están contando las croquetas. Trump la quiere, dicen… pero sus otros altos funcionarios la detestan, especialmente por dejar que Lewandowski mande más que ella. Tres exfuncionarios —con contactos en la administración actual— confirman que el plan para correrla podría ejecutarse “muy pronto”.
(https://www.thebulwark.com/p/trump-dhs-homeland-security-secretary-noem-future)

La cosa está tan fea que un funcionario interno describió el estado del departamento así:
“Things are fucked.”
Traducción Noem-friendly: “Está hecho un muladar.”

Youngkin, el gobernador de Virginia, ya está calentando, por si la sacan al patio trasero para “darle un paseíto”.
(https://www.mediaite.com/media/news/trump-considering-move-to-oust-homeland-security-secretary-kristi-noem-report/)

Pero mientras en Washington chismean… en las calles ICE desgarra gente

El colmo de la crueldad —y la gota que podría derrumbar a Noem— es su negativa a asumir responsabilidad por un ataque inhumano: un agente de ICE engañó a Wilmer Toledo-Martínez haciéndose pasar por trabajador de construcción, lo sacó de su casa… y otro agente le soltó un perro entrenado encima.

Wilmer no estaba huyendo, no se resistió, no era una amenaza.
Sólo era un hombre parado frente a su casa.
Hasta que Noem y su agencia decidieron tratarlo como juguete para un perro.

La senadora Patty Murray describió las heridas como “horrific”, y las fotos lo confirman: cortes profundos, piel arrancada, sangre. El ataque ocurrió frente a su esposa y a sus hijos ciudadanos. Luego, como típico trámite en la burocracia deshumanizada de Noem, lo dejaron sin atención médica por horas.
(https://www.theguardian.com/us-news/2025/dec/06/us-senator-ice-attack-dog-horrific-injuries)

Esto no es aplicación de la ley. Es sadismo con uniforme.

Y mientras tanto, Noem juega a “yo no fui”

A Noem le encanta posar como la heroína del orden, pero cuando ICE atropella el pie de un hombre en Vancouver o cuando una congresista como Adelita Grijalva termina rociada con gas en un operativo mal planeado, la secretaria desaparece como perro regañado.
(https://www.theguardian.com/us-news/2025/dec/06/us-senator-ice-attack-dog-horrific-injuries)

La Barbie de ICE se limita a sonreírle a Trump y decirle ridiculeces como:
“Nos libraste de huracanes.”
Vaya, ni los huracanes creen en ese cuento.

El problema no es que Noem sea incompetente. Es que es peligrosa.

Entre su historial de ejecuciones caninas, su relación tóxica y turbísima con Lewandowski, y su comando de una fuerza federal que opera con engaños, violencia y cero supervisión, queda claro:

Noem no perdió el control de su perro.
Perdió el control del país que juró proteger.

Y quizá —solo quizá— Trump ya huele la carroña política.
El amor “perro” que le tenía parece estar enfriándose.

Pero si la van a sacar, que no sea por chisme…
que sea por las vidas que su agencia ha destrozado.

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